Como fiel amante de nuestro tesoro, la isla de Borikén (Puerto Rico), y aún más, de mi paraíso, Cabo Rojo, siento una gran preocupación por la invasión de pez león en nuestras playas y arrecifes. Cuando unos parientes que bucean, tal como yo y mi compañero, por los arrecifes de nuestro hermoso Buyé en Cabo Rojo, anunciaron el avistamiento de siete peces leones en una sola buceada, me alarmé. Esperé ver las fotos, fotos que añoraba ya que en estos momentos estoy fuera de la isla y me permitían sentir esa conexión con mi paraíso, sentí la angustia del futuro que le espera a la vida marina de tan hermoso lugar.
No lo pensé dos veces y tal como se había anunciado en los medios de comunicación, procedí a llamar a los números indicados. Cuarenta minutos exactos de intento tras intento donde en varias ocasiones pude hablar con la recepcionista que me daba extensiones y luego hasta nombres de personas que jamás conseguí y a quienes tampoco le podía dejar mensajes, porque una vez sonaba la señal para que dejara el mensaje y yo comenzaba a hablar, salía otra grabación diciéndome que no podía dejar mensajes!!! Me recomendaron que escribiera a través de la página de internet de Recursos Naturales, lo cual por supuesto me rehusé a hacer, porque aún estoy esperando la respuesta a mi email que escribí durante la primavera y no fue sino a través de la perseverancia con las llamadas telefónicas y el Sr. Juan Rodríguez de la Oficina del Comisionado de Navegación, que como EJEMPLAR servidor público, dio seguimiento a mi pedido y hoy dia tenemos las boyas de reducción de velocidad en La Pitahaya en Cabo Rojo.
Ese 28 de octubre de 2010, también llamé a la alcaldía de Cabo Rojo para informarles del avistamiento de pez león en nuestras playas.
El 29 de octubre, volví a intentar comunicación con el Laboratorio de Investigaciones Pesqueras a quienes también había llamado infructuosamente el dia anterior. Esta vez tuve la dicha de conversar con la Sra. Noemi Peña. Fue grato el darme cuenta que al fin había comunicándome con alguien que de veras tiene y siente un interés legítimo en proteger lo nuestro. Hice varias preguntas, buscando alternativas y sus respuestas lógicas me hacían entender cada vez más, que por más hermoso que fuera ese pez cuyo por años había admirado su belleza, ahora estaba acabando con los nuestros, que no dejan de ser hermosos también.
Existen varias teorías de cómo llegó el pez león a nuestras playas; pero lo importante es mirar hacia adelante, buscar soluciones y tomar acción. Si nosotros como pueblo, nos quedamos cruzados de brazos esperando que el gobierno se encargue del problema, eventualmente vamos a tener peces leones, como lagartijos tiene la isla. Me consta que la falta de personal es un factor muy grave y que la colaboración del ciudadano en estos momentos es crucial.
Si usted ha leído hasta aquí y está pensando en que ayudar a la caza y erradicación de esta plaga, le va a ayudar a comprarse el carrito ese que le gusta, desde ya le digo que puede dejar de leerme, porque "aquí no hay chavos", y si los hubiese, ya alguien de nuestros supuestos líderes se hubiese encargado de que desaparecieran. Triste, pero es una realidad. Lo que sí les puedo decir con certeza es que eventualmente, este problema le va a afectar su bolsillo y mire que sabemos que si estiramos más el dólar, se nos va a romper en cantos!
El pez león es un pez glotón. En un período de 30 minutos se come 20 peces. No he investigado tanto como para saber cuántas veces come al día, pero si va multiplicando y sumando e imaginándose cuántos peces leones están en nuestras aguas, va a darse cuenta que estamos hablando de números GRANDES.
Si utilizamos el ejemplo del pescador comercial de Puerto Real que trajo a tierra 90 peces leones y relató de los muchos otros que mató y dejó en el mar; ASUMIENDO que solo comieran una vez al día, estamos hablando de 1,800 peces nativos que fueron eliminados en un solo dia. Las langostas, el carrucho, los cangrejitos también endulzan el paladar del pez glotón, digo, del pez león. !Señores, ésto va a afectar a varias industrias! !Póngase las pilas! En Cabo Rojo han habido avistamientos desde Joyuda hasta La Pitahaya.
Pero, rompamos los mitos y que conste que NO SOY una experta en la materia y no represento ninguna autoridad y solo le invito a que se informe y haga algo al respecto, por el bien de nuestro pueblo.
* Al pez león le encanta estar por arrecifes y áreas de algas.
* Aunque su veneno es muy doloroso HASTA AHORA, no han habido reportes de muerte al humano.
* El pez león tiene sus espinas más venenosas en el área dorsal, pélvico y anal.
* El pez león TAMBIEN habita en las profundidades del mar. (Por eso es tan necesaria la colaboración de pescadores comerciales para erradicar esta plaga.)
* Si usted es picado por una aguja de pez león, salga del agua de inmediato, asegúrese de que no haya quedado fragmento de la aguja y aplique algo caliente sobre el área y/o recurra a emergencias médicas. El efecto del veneno dura alrededor de 30 minutos (lo cual puede sentirse como una eternidad, cuando es a usted al que picó!)
Este problema ya no es de nuestra patria solamente, sino que México, Las Bahamas y otros países del Caribe están enfrentando el mismo problema. Este mes habrá un consorcio entre varias naciones para discutir este tema.
Personalmente debatí mental y emocionalmente con el solo pensar que había que matar a este hermoso pez, sin embargo entiendo ya a conciencia cierta, que es lo que tenemos que hacer. No estamos extinguiendo una especie, ya que el pez león es oriundo de las aguas del Pacífico donde alli sí tiene a su "componte", o sea, otros que se lo comen a él. La propagación en nuestras aguas es precisamente efectiva porque tiene la ventaja de haberse adaptado a nuestras aguas más cálidas donde no existe enemigo para él y nuestros peces no lo reconocen como enemigo y no tienen defensa en su contra. Por lo tanto siguen nadando cerca como Pedro por su casa, hasta que... plup!....se los comieron!
El anhelo de las agencias que están atendiendo este caso es promover el consumo del pez león. Se entiende que existe cierta renuencia al consumo debido a los mitos que se regaron y el temor al veneno del pez. Existen videos como el del Oceanólogo Joel González (En YouTube), donde presenta cómo preparar el pez. Puede parecer mucho trabajo para algunos, pero en realidad no lo es, todo va a depender de la disposición del que lo prepara. Hay peces leones que crecen hasta 17 a 20 pulgadas. (Más trabajo se pasa haciendo pasteles y no hay una Navidad que un boricua no se coma uno!)
Me siento agradecida de los Comerciantes, Escuelas de buceo del área y voluntarios que ya están colaborando para eliminar la mayor cantidad posible de estos peces en nuestras aguas, pero se necesitan aún más voluntarios. El Laboratorio de Investigaciones Pesqueras, a través del Sr. Joel O. Meléndez, está ofreciendo Adiestramientos para Voluntarios, de cómo cazar y qué pasos han de seguir a todo aquél ciudadano que desee colaborar y unirse a la causa.
Es importante aclarar que los buzos de SCUBA en estos momentos NO ESTAN autorizados a utilizar arpones; algo que ya se está tratando de cambiar a nivel legislativo para poder cambiar la ley y que estos buzos, que comúnmente bajan hasta 60 pies de profundidad puedan ayudar con los peces leones que se hallen en esas profundidades. A los buzos "de pulmón" ó de snorkels SI se les permite utilizar arpones, según me informó la Sra. Noemi Peña.
Si usted caza un pez león, no desea consumirlo, pero necesita una avenida para disponer de éste, puede llevarlo al Laboratorio de Investigaciones Pesqueras, donde ellos dispondrán de éstos.
Yo solo soy una persona, y considero que existen otros ciudadanos que desean preservar lo nuestro. Su ayuda es de extrema importancia. Si podemos sumergirnos al mar para recoger toneladas de basura que ponen en peligro la vida marina, estoy segura se puede hacer algo también para unir nuestros esfuerzos con esta causa tan importante para nuestro ecosistema, como para la economía e industrias en general, y finalmente, nuestros propios bolsillos.
Gracias por tomarse el tiempo de leerme,
Tai Pelli (Migdalia Ma. Pellicier)
Contactos:
Laboratorio de Investigaciones Pesqueras (Ubicado en Punta Arenas, al final de Joyuda, cerca de la correccional)
787-833-2025
Adiestramientos para Voluntarios interesados en la caza del pez león
Sr. Joel O. Meléndez (llamar al número arriba indicado)
Por internet:
jmelendez@prxtreme.com